POLITICA
28/08/2024
Gobierno reduce el Impuesto PAIS para importaciones, pero mantiene gravámenes al turismo
Por Jose Manuel Ferrero
En una medida que busca reactivar la economía y aliviar la presión sobre el bolsillo de los consumidores, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció anoche una reducción del Impuesto PAIS para la importación de bienes y fletes. A partir del próximo lunes, la alícuota pasará del 17,5% al 7,5%.
Esta decisión revierte una medida implementada por el gobierno de Javier Milei a principios de su mandato, que había elevado el impuesto con el objetivo de fortalecer las reservas del Banco Central. Sin embargo, el gravamen que incide en el turismo, tanto en compras como en viajes al exterior, se mantendrá sin cambios.
"¡Prometimos y cumplimos!", expresó Caputo a través de su cuenta de X, confirmando así los rumores que circulaban en el mercado. La rebaja del impuesto es considerada una señal positiva para el sector productivo, ya que se espera que genere una disminución de los precios en las góndolas y beneficie al consumidor final.
La medida también podría interpretarse como una señal hacia el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el que el gobierno mantiene negociaciones en el marco del acuerdo de refinanciación de la deuda. El organismo multilateral ha insistido en la necesidad de una mayor flexibilidad cambiaria y la eliminación gradual de restricciones al comercio exterior.
Por otro lado, la reducción del impuesto PAIS genera una tensión con el objetivo de mantener el superávit fiscal, uno de los pilares de la política económica del gobierno. Además, se produce en un contexto de fuerte discusión en el Congreso por la aprobación de una reforma previsional que incrementaría el gasto público.
Si bien la reducción del impuesto para importaciones es una buena noticia para los consumidores, es importante destacar que los gravámenes al turismo se mantienen sin cambios. Esto significa que los argentinos que deseen viajar al exterior o realizar compras en el exterior seguirán enfrentando altos costos adicionales.
El gobierno argentino ha dado un paso hacia la flexibilización de la economía con la reducción del Impuesto PAIS para importaciones. Sin embargo, la decisión de mantener los gravámenes al turismo genera cierta incertidumbre y podría limitar el impacto positivo de la medida en el consumo.
Esta decisión revierte una medida implementada por el gobierno de Javier Milei a principios de su mandato, que había elevado el impuesto con el objetivo de fortalecer las reservas del Banco Central. Sin embargo, el gravamen que incide en el turismo, tanto en compras como en viajes al exterior, se mantendrá sin cambios.
"¡Prometimos y cumplimos!", expresó Caputo a través de su cuenta de X, confirmando así los rumores que circulaban en el mercado. La rebaja del impuesto es considerada una señal positiva para el sector productivo, ya que se espera que genere una disminución de los precios en las góndolas y beneficie al consumidor final.
La medida también podría interpretarse como una señal hacia el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el que el gobierno mantiene negociaciones en el marco del acuerdo de refinanciación de la deuda. El organismo multilateral ha insistido en la necesidad de una mayor flexibilidad cambiaria y la eliminación gradual de restricciones al comercio exterior.
Por otro lado, la reducción del impuesto PAIS genera una tensión con el objetivo de mantener el superávit fiscal, uno de los pilares de la política económica del gobierno. Además, se produce en un contexto de fuerte discusión en el Congreso por la aprobación de una reforma previsional que incrementaría el gasto público.
Si bien la reducción del impuesto para importaciones es una buena noticia para los consumidores, es importante destacar que los gravámenes al turismo se mantienen sin cambios. Esto significa que los argentinos que deseen viajar al exterior o realizar compras en el exterior seguirán enfrentando altos costos adicionales.
El gobierno argentino ha dado un paso hacia la flexibilización de la economía con la reducción del Impuesto PAIS para importaciones. Sin embargo, la decisión de mantener los gravámenes al turismo genera cierta incertidumbre y podría limitar el impacto positivo de la medida en el consumo.
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