INTERES GENERAL
09/01/2025
José Mujica confirmó que su cáncer es terminal y pide tranquilidad en sus últimos días
Por José Manuel Ferrero
El expresidente de Uruguay, José “Pepe” Mujica, de 88 años, reveló en una entrevista con el medio local Búsqueda que el cáncer de esófago que le fue diagnosticado en abril pasado se ha extendido al hígado, declarando que se encuentra en la etapa final de su vida. “Me estoy muriendo”, afirmó con serenidad el exmandatario.
“El cáncer en el esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada. ¿Por qué? Porque soy un anciano y porque tengo dos enfermedades crónicas”, explicó Mujica, quien también descartó tratamientos invasivos como la quimioterapia o la cirugía debido a la fragilidad de su estado de salud.
En su mensaje, solicitó respeto por su privacidad en este momento tan delicado: “Lo que pido es que me dejen tranquilo. Que no me pidan más entrevistas ni nada más. Ya terminó mi ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”.
Mujica vive junto a su esposa, la también política Lucía Topolansky, en su chacra en Rincón del Cerro, donde planea permanecer hasta el final. “Yo me voy a morir acá. Ahí afuera hay una sequoia grandota. Está Manuela (su perra) enterrada ahí. Estoy haciendo los papeles para que ahí también me entierren a mí. Y ya está”, aseguró.
El diagnóstico inicial de su enfermedad fue anunciado en abril de 2024, tras la detección de un tumor durante un chequeo médico. En aquel momento, Mujica detalló que su situación era compleja debido a una enfermedad inmunológica preexistente, lo que limitaba las opciones de tratamiento.
El mundo entero lamenta esta noticia, mientras el carismático líder uruguayo enfrenta con dignidad y calma el tramo final de su vida. Mujica, siempre fiel a sí mismo, deja un legado imborrable de lucha, inspiración y humanidad.
“El cáncer en el esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada. ¿Por qué? Porque soy un anciano y porque tengo dos enfermedades crónicas”, explicó Mujica, quien también descartó tratamientos invasivos como la quimioterapia o la cirugía debido a la fragilidad de su estado de salud.
En su mensaje, solicitó respeto por su privacidad en este momento tan delicado: “Lo que pido es que me dejen tranquilo. Que no me pidan más entrevistas ni nada más. Ya terminó mi ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”.
Mujica vive junto a su esposa, la también política Lucía Topolansky, en su chacra en Rincón del Cerro, donde planea permanecer hasta el final. “Yo me voy a morir acá. Ahí afuera hay una sequoia grandota. Está Manuela (su perra) enterrada ahí. Estoy haciendo los papeles para que ahí también me entierren a mí. Y ya está”, aseguró.
El diagnóstico inicial de su enfermedad fue anunciado en abril de 2024, tras la detección de un tumor durante un chequeo médico. En aquel momento, Mujica detalló que su situación era compleja debido a una enfermedad inmunológica preexistente, lo que limitaba las opciones de tratamiento.
El mundo entero lamenta esta noticia, mientras el carismático líder uruguayo enfrenta con dignidad y calma el tramo final de su vida. Mujica, siempre fiel a sí mismo, deja un legado imborrable de lucha, inspiración y humanidad.