POLITICA
01/09/2024
Schiaretti se proyecta hacia 2027 y reafirma su postura de no participar en las legislativas
Por REDACCION
El exgobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, ya piensa en 2027. Mientras evita comprometerse en las elecciones legislativas de medio término, se enfoca en recorrer el país y fortalecer su "estructura de centro", la cual aspira a convertir en la plataforma de lanzamiento de su candidatura presidencial. La incertidumbre sobre las candidaturas para las elecciones de 2025 persiste, y tanto Schiaretti como el actual gobernador Martín Llaryora han decidido postergar hasta marzo próximo la definición de los nombres que integrarán las listas del oficialismo provincial.
Mientras se mantiene al margen del juego electoral inmediato, Schiaretti tiene claros algunos puntos estratégicos: no será candidato a diputado nacional por Córdoba, mucho menos por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y se dedicará a consolidar su espacio político. Su objetivo es claro: construir una fuerza política que lo catapulte hacia la Casa Rosada en 2027.
Schiaretti contempla un escenario en el que Javier Milei es presidente y cree que la controversia desatada por Alberto Fernández seguirá golpeando duramente al peronismo, afectando las chances del gobernador bonaerense Axel Kicillof. "Esta bomba que detonó Alberto le da en la línea de flotación a Cristina Fernández, a Axel y a todo el peronismo, especialmente al alineado con los K", aseguró una fuente confiable del peronismo.
Convencido de que su oportunidad está al alcance, Schiaretti continuará con sus giras por el interior y la capital federal, fortaleciendo su estructura política sin adelantar su candidatura. Con optimismo y determinación, el exgobernador cree que el presidente Milei enfrentará grandes desafíos para mantener un equilibrio fiscal, especialmente con la reducción del impuesto PAÍS. “No le quedará otra que seguir ajustando, y habrá que ver cómo reacciona la sociedad, que hasta ahora lo ha apoyado”strong>, reflexionó uno de sus más cercanos colaboradores.
En cuanto a la situación en Córdoba, Schiaretti se muestra relativamente tranquilo. A pesar de los problemas generados por la retención de fondos por parte del Gobierno nacional, Llaryora ha manejado la situación con prudencia, sin enfrentarse directamente con Milei pero evitando una sumisión excesiva.
Pugna por candidaturas en el interior del Llaryorismo
La disputa por las candidaturas dentro del oficialismo provincial sigue en ascenso, generando tensiones y especulaciones. En las últimas semanas, rumores indicaban que la vicegobernadora Myrian Prunotto había decidido no competir en las elecciones legislativas que tendrán lugar el año próximo cuando se renueven bancas en el Congreso Nacional. En tal sentido, Prunotto aseguró que no aspiraba a un escaño en la Cámara de Diputados. Sin embargo, a través de sus voceros, Prunotto aclaró que nunca se había postulado y que está dispuesta a hacer lo necesario por el cordobesismo.
Según allegados a la vicegobernadora, "Está sufriendo los efectos del fuego amigo", quien además aseveró que los rumores provienen del propio justicialismo, producto de la batalla interno política de cara a 2025. La lucha por el segundo lugar en la lista del oficialismo provincial promete ser encarnizada, con varias figuras en disputa por un solo puesto, en un escenario donde el PJ podría obtener dos bancas, a menos que la oposición logre una alianza significativa.
En medio de estas tensiones, se han mencionado posibles alianzas de Schiaretti con el ARI-Coalición Cívica de Elisa Carrió, donde podría surgir el nombre de Laura Sesma como candidata.
Obras y tiempo, dos elementos centrales de cara a 2025.
En paralelo a las intrigas en el plano político, Llaryora está concentrado en dejar su huella en la gestión con proyectos emblemáticos. Uno de los más destacados es la remodelación del estadio Mario Alberto Kempes y la construcción de un domo cerrado con capacidad para entre 15.000 y 20.000 espectadores en el parque Juan Bautista Bustos. Este nuevo espacio se destinará a eventos deportivos y espectáculos que no puedan realizarse en el Kempes.
Para los funcionarios involucrados, estas obras no solo impulsarán el empleo, sino que también valorizarán la gestión del gobierno provincial. Llaryora, en respaldo de Juan Schiaretti.
Mientras tanto, el gobernador observa con atención al radicalismo, al Frente Cívico de Luis Juez y a La Libertad Avanza, el partido oficialista a nivel nacional que en Córdoba aún carece de una estructura sólida, pero que lentamente va ganando espacio. La gran incógnita será si el electorado cordobés mantendrá su apoyo a Milei o si optará por otras alternativas en las urnas.
Mientras se mantiene al margen del juego electoral inmediato, Schiaretti tiene claros algunos puntos estratégicos: no será candidato a diputado nacional por Córdoba, mucho menos por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y se dedicará a consolidar su espacio político. Su objetivo es claro: construir una fuerza política que lo catapulte hacia la Casa Rosada en 2027.
Schiaretti contempla un escenario en el que Javier Milei es presidente y cree que la controversia desatada por Alberto Fernández seguirá golpeando duramente al peronismo, afectando las chances del gobernador bonaerense Axel Kicillof. "Esta bomba que detonó Alberto le da en la línea de flotación a Cristina Fernández, a Axel y a todo el peronismo, especialmente al alineado con los K", aseguró una fuente confiable del peronismo.
Convencido de que su oportunidad está al alcance, Schiaretti continuará con sus giras por el interior y la capital federal, fortaleciendo su estructura política sin adelantar su candidatura. Con optimismo y determinación, el exgobernador cree que el presidente Milei enfrentará grandes desafíos para mantener un equilibrio fiscal, especialmente con la reducción del impuesto PAÍS. “No le quedará otra que seguir ajustando, y habrá que ver cómo reacciona la sociedad, que hasta ahora lo ha apoyado”strong>, reflexionó uno de sus más cercanos colaboradores.
En cuanto a la situación en Córdoba, Schiaretti se muestra relativamente tranquilo. A pesar de los problemas generados por la retención de fondos por parte del Gobierno nacional, Llaryora ha manejado la situación con prudencia, sin enfrentarse directamente con Milei pero evitando una sumisión excesiva.
Pugna por candidaturas en el interior del Llaryorismo
La disputa por las candidaturas dentro del oficialismo provincial sigue en ascenso, generando tensiones y especulaciones. En las últimas semanas, rumores indicaban que la vicegobernadora Myrian Prunotto había decidido no competir en las elecciones legislativas que tendrán lugar el año próximo cuando se renueven bancas en el Congreso Nacional. En tal sentido, Prunotto aseguró que no aspiraba a un escaño en la Cámara de Diputados. Sin embargo, a través de sus voceros, Prunotto aclaró que nunca se había postulado y que está dispuesta a hacer lo necesario por el cordobesismo.
Según allegados a la vicegobernadora, "Está sufriendo los efectos del fuego amigo", quien además aseveró que los rumores provienen del propio justicialismo, producto de la batalla interno política de cara a 2025. La lucha por el segundo lugar en la lista del oficialismo provincial promete ser encarnizada, con varias figuras en disputa por un solo puesto, en un escenario donde el PJ podría obtener dos bancas, a menos que la oposición logre una alianza significativa.
En medio de estas tensiones, se han mencionado posibles alianzas de Schiaretti con el ARI-Coalición Cívica de Elisa Carrió, donde podría surgir el nombre de Laura Sesma como candidata.
Obras y tiempo, dos elementos centrales de cara a 2025.
En paralelo a las intrigas en el plano político, Llaryora está concentrado en dejar su huella en la gestión con proyectos emblemáticos. Uno de los más destacados es la remodelación del estadio Mario Alberto Kempes y la construcción de un domo cerrado con capacidad para entre 15.000 y 20.000 espectadores en el parque Juan Bautista Bustos. Este nuevo espacio se destinará a eventos deportivos y espectáculos que no puedan realizarse en el Kempes.
Para los funcionarios involucrados, estas obras no solo impulsarán el empleo, sino que también valorizarán la gestión del gobierno provincial. Llaryora, en respaldo de Juan Schiaretti.
Mientras tanto, el gobernador observa con atención al radicalismo, al Frente Cívico de Luis Juez y a La Libertad Avanza, el partido oficialista a nivel nacional que en Córdoba aún carece de una estructura sólida, pero que lentamente va ganando espacio. La gran incógnita será si el electorado cordobés mantendrá su apoyo a Milei o si optará por otras alternativas en las urnas.